¿Ya está obsesionado con emparejar colores? Prueba estas actividades

Entre los 26 y los 29 meses, tanto las niñas como los niños empiezan a aparear objetos blancos y los negros entre sí, y a veces también algunos colores primarios. Para actividades de emparejar colores pueden resultarte realmente útiles los limpiapipas de chenilla blancos y negros, los pompones para manualidades o los palitos de madera con puntas coloreadas.

Aquí tienes algunas opciones para practicar la combinación de colores:

• Utiliza 3 objetos – dos negros, uno blanco- que sean exactamente iguales excepto por el color.
• Ponlos delante de tu niño y dile “A ver qué dos van juntos”.
• Si lo consigue, pregúntale por qué escogió estos dos. Puede que todavía no sea capaz de explicar bien su razonamiento, o puede que te sorprenda 😉.
• Prueba a poner un objeto blanco dentro de un recipiente y uno negro dentro de otro. Luego, dale a tu hijo un puñado de objetos de color blanco y negro, y pregúntale: “¿Quieres intentarlo tú ahora?, ¿en qué recipiente crees que va?”.
• Luego añade un color primario a la mezcla: por ejemplo, dale a tu hijo un objeto blanco y dos rojos y repite la actividad del recipiente. Comparar dos colores primarios, como el amarillo y el rojo, suele ocurrir un poco más tarde, hacia los 29 y los 33 meses.
• Si tienes un tablero de damas, pídele a tu hijo que haga coincidir las piezas rojas con los cuadros del tablero y las negras respectivamente. Dale solamente unas cuantas piezas, no todas a la vez, y luego ve dándole más poquito a poco.

Hacia los 33 meses, las niñas y los niños a menudo ya son capaces de emparejar entre tres y cinco objetos del mismo color. Aquí tienes un par de actividades divertidas de clasificar colores que puedes probar con tu hijo:

• Hazte con pompones multicolores para hacer manualidades, unas pinzas aptas para niños y una huevera de cartón. Con un subrayador o pintura, pinta colores en la huevera que coincidan con los pompones, y luego muéstrale a tu hijo cómo empezar a clasificar los pompones según su color. También los podéis clasificar por tamaño.
• Crea una rueda de colores con objetos de casa. Recopilad juntos objetos por toda la casa en todos los colores del arcoíris. Coloca un objeto de cada color en el piso siguiendo un patrón circular. Pide a tu hijo que agrupe el resto de los objetos según su color, para que cree así un bonito arcoíris. El resultado es estéticamente muy satisfactorio y, además, el trabajo realizado para conseguirlo le permite a tu hijo una experiencia significativa de aprendizaje de los colores.
• Combina el trabajo de motricidad fina y el emparejar colores con un juego sensorial de recoger y clasificar objetos de un contenedor con una cuchara. En un contenedor grande no muy profundo o en una mesa sensorial, vierte agua y tira algunos objetos que floten de varios colores (libros o huevos de plástico, formas de espuma, flores y hojas, etc.). Da a tu hijo una cuchara ranurada de metal o de madera y unas tazas que sean del color que coincida con los objetos flotando (siempre puedes utilizar los moldes de silicona de las magdalenas o tazas transparentes con alguna marca de color que las distinga). Muéstrale cómo recoger los objetos flotantes con la cuchara para colocarlos en la taza del mismo color.

El Atrapapuntos de colores es una herramienta fantástica para practicar el emparejamiento de colores, la coordinación motora y visual, y la motricidad fina.

• Primero, deja que tu hijo suelte los puntos dentro del tablero como quiera antes de sugerirle que combine los colores.
• Luego agrupa las fichas en pilas de colores e identifíquelas («todas estas fichas son rojas”).
• Luego prueba si, poniendo tú todas las fichas rojas en una línea de izquierda a derecha alineadas con las ranuras de color rojo, tu hijo se anima a poner las fichas del siguiente color encima de las tuyas.
• Lo siguiente es intentar completar una columna, contando cada ficha que dejes caer, y pedirle a tu hijo que complete la siguiente columna.
• Probablemente con lo que más se va a divertir 🎉 más es darle muchas veces al mecanismo que deja caer todas las fichas, ¡así que no parará de hacerlo!

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