A los dos años, tu hija o hijo seguro que ya ha empezado a ser consciente de los sonidos que le rodean. Así es cómo puedes ayudarle a conectar con los sonidos.
Las rutinas, las secuencias y el uso de palabras relacionadas con el tiempo sientan las bases para que tu hijo desarrolle su comprensión del concepto del tiempo.
La filosofía del Dr. Dan Siegel ”name it to tame it” ayuda a niñas y niños a calmarse a través de reconocer y poner etiquetas a sus emociones más fuertes.
Ir introduciendo el quién, el qué, el dónde, el por qué y el cómo a través de pequeñas lecciones, anima a tu pequeño a empezar a explicar qué es lo que le interesa.
Aprende cómo desarrollar las capacidades del lenguaje y comprensión de tu hijo con mucho vocabulario, conversaciones recíprocas, narración y repetición.
Una mentalidad de desarrollo lleva a la resiliencia, el valor y la resistencia, y enseña a tu hijo que su inteligencia, capacidades y talentos pueden crecer más cuanto más aprendan.
Describir a tu hijo el comportamiento que quieres ver, evita que refuerces aquello que no quieres que haga. Aquí te explicamos cómo decir “no” con menos frecuencia.
¿Le hablas en tercera persona a tu niño pequeño? El “ileísmo” puede ayudar a tu niño pequeño a desarrollar sus habilidades lingüísticas hasta que entienda los pronombres.
Muchas niñas y niños pueden empezar, de repente, a desarrollar miedos más acentuados entre los 24 y 30 meses. Puedes reaccionar así.
Esta actividad de manualidades para hacer en casa plasma las primeras palabras de tu hijo y desarrolla su vocabulario a medida que su habla evoluciona.
Con 2 años, tu hijo empieza a entender el funcionamiento de un libro. Aquí te mostramos algunas estrategias para motivar al emergente lector motivándole con estímulos imprimibles.
Aquí te presentamos 8 de las maneras en las que tu hijo está aprendiendo a hablar, aunque todavía no diga mucho.
Tu pequeño seguramente entiende más de lo que puede expresar. Aquí te dejamos 4 maneras en las que tu pequeño se comunica sin palabras.
Viajar con niños puede ser complicado. Aquí hay algunas ideas para el coche que no requieren materiales ni tecnología y en las que pueden participar tanto quienes conducen como los pasajeros.
